¿Dónde estás, lluvia?
¿Dónde está tu belleza sobrenatural?

Quiero desvelarme con el aire que respirás; recorrerte y acariciarte, observar hasta tus mínimos detalles...
Un segundo de esperanza, correr unos milímetros la cortina del futuro y ver que todos los sueños se cumplen... Esa potencia que sólo el amor puede hacer posible en nosotros...

¿Cómo se entiende que tanto amor no sea correspondido?

Cuando me falla la fe no quiero entender las enseñanzas y las huellas que nos dejan y dejamos en el mundo; es que estoy cansada de buscarte en cada cara, en cada caminar, en cada persona... Tengo tantas ganas de vos, de esos sueños que me llenaron los horizontes (aunque sólo hayan sido para vos intenciones, no más que ensueños)

Tendré que esperar que el corazón expulse la espina al cicatrizar...